Estar equivocado

Envidio la seguridad de algunas personas para con sus propias ideas u opiniones: siempre claras, inalterables en el tiempo y sin el más mínimo rasgo de duda. Yo, que hago pie en mis convicciones, observo atónito como otros bucean en las suyas para encontrar allí, en lo más profundo, siempre una respuesta. 
Vendería mi alma al diablo por disponer de esa seguridad que otros tienen o, al menos, aparentan; y la vendería,  aunque el precio que tuviera que pagar fuese estar equivocado.

1 comentario:

  1. A mi me parece que tienes unas ideas ferreas y las defiendes con el cuchillo entre los dientes.
    Felipe

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