“Lo que un hombre es en sí mismo, lo que le acompaña en la soledad y lo que nadie puede darle ni quitarle, es indudablemente más esencial para él que todo lo que puede poseer o lo que puede ser a los ojos de los demás.” (Arthur Schopenhauer)

Mi otra vida

Es una idea que me ha estado rondando la cabeza desde hace unos días. Ya he tomado la decisión. Voy a inventarme otra vida.
 
No es que la mía no me guste, no… me gusta y mucho. No me puedo quejar de nada, todo me va relativamente bien y no encuentro (a nivel personal) motivos importantes de queja. El problema, por llamarlo de algún modo, es que hace unos meses me ha dado por escribir en un blog, que esta semana me he decidido por fin a usar Facebook y que tal vez en unos días me abra una cuenta en Twitter. ¿Y dónde está el problema?. Pues que soy una persona con una vida muy común, muy normal, de gustos extremadamente  sencillos y que disfruta enormemente no haciendo nada. Temo que mi vida, al menos en estos círculos, corre el riesgo de ser… poco presentable.
 
Lo primero que voy a hacer es contratar a un guionista. Hay gente que contrata a alguien para que haga las tareas de la casa, cuide a sus hijos, le limpien el coche, atiendan de sus padres o le pinten la casa. Yo, que tengo todas esas necesidades cubiertas, he llegado a la conclusión que lo que realmente necesito es un buen guionista. Ni mi vida ni mi ingenio dan para mucho más y sería de gran ayuda disponer de alguien que me tenga preparada siempre una buena historia, el mejor comentario, el más ocurrente, la idea más genial o la más descerebrada y todo ello en el momento oportuno. Alguien al que poder decir:
“Mándale un privado a Esther, por favor. Si… esa, la que me dejó tirado como un perro  y se largó con el guitarrista de aquél grupo de rock tan famoso en la ciudad hace quince años. Sí, la misma. Con el tiempo el guitarrista se convirtió en visitador médico, está todo el santo día entrajetado y viven en un adosado en lo más pijo del lugar. Pero por favor… dale al mensaje un toquecito canalla, que se joda y me eche de menos.”
Y lo segundo, un especialista en diseño gráfico. Dicen que la tele engorda, no lo sé… lo que sí sé con absoluta certeza, lo que he podido comprobar numerosas veces y es algo que está fuera de toda duda es que mi cámara de fotos Nikon engorda. Creo que se ha activado algún programa interno de reconocimiento de rostro y por algún motivo extraño dicho programa falla; es verme a mí y la cámara se ensaña. Y con el paso del tiempo la cámara va a peor, últimamente le da por sacarme con menos pelo del que realmente tengo. Supongo que sea un defecto de fábrica del software, pues noto el mismo fallo en las cámaras de amigos y familiares. El caso es que creo no hacer ningún mal si un buen profesional es capaz de devolver a la fotografía (tampoco pido más) la belleza del original.
 
Otro asunto importante que tiene que ver con las fotos son los fondos. Me da uno pereza enorme viajar. Además, vivo a más de 500km (aproximadamente cinco horas de coche, con niño seis) de casi todas las personas que realmente me importan y cuando tengo vacaciones, lo que menos me apetece es poner aún más tierra de por medio. Pero este hecho tiene como consecuencia que los fondos de mis fotos son un tanto monótonos. Nacho en casa, Nacho en el parque, Nacho en una comida familiar, Nacho en…. He pensado que tal vez llamen más la atención un fondo tipo Nacho en las Pirámides, Nacho en el Gran Cañón, Nacho sosteniendo la Torre de Pisa, o algo sí. Después de todo el fondo, el decorado, es algo totalmente accesorio y que no tiene la más mínima importancia.

Estas dos personas se encargarían de gestionar eficazmente todos estos aspectos relacionados con mi e-vida, mientras yo me dedico alegremente a la que siempre ha sido la mía.
 
Un par de amigos a los que les he comentado la idea me han dicho:
“¡Pero Nacho! ¡Qué chifladura es esa!. ¿De verdad no te das cuenta que es una idea de un cinismo y una hipocresía que roza lo patológico?¿Pero por el amor de Dios, a quién pretendes engañar?”
¿Hipocresía? No sé… tal vez sí. Pero tampoco te creas tú que mucha más de la que suelo utilizar habitualmente. En cuanto a quién pretendo engañar... obviamente, a mí mismo.

3 comentarios:

  1. Pues eso, yo por ahí vendiendo humo y resulta que tú tienes otra vida. Vida que por lo que veo sólo es un boceto porque te falta el guionista y el escenógrafo o un director de escena. Pero, ¿no ves que tú eres todo eso y más? ¡Qué suerte poder escribir el guión de nuestra propia vida, aunque sea la otra, sin torceduras ni tachones! No será en ésta, pero quién sabe si en otra...

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  2. Tardaré un poco en ponerme al día, pero me pondré

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  3. Yo tengo un par de fotos tuyas imitando a la maja desnuda de un nivel artístico muy alto para tu "Book" de presentación en sociedad.

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